jueves, 20 de septiembre de 2012

Atrapada en la rutina

El barco navega tranquilamente por el Océano Pacífico, mientras el sol comienza a descender por detrás de las colinas donde está la ciudad. La tristeza que creí ver en mis compañeros de tren cuando llegamos dio paso a una euforia descontrolada. Todos nos comportamos como si fuera la primera vez que viéramos el mar; nadie quiere pensar en que pronto estaremos diciendo “adiós”, prometiendo que volveremos a vernos en breve, convencidos de que esa promesa es sólo para hacer más fácil la despedida.
El viaje está acabando, la aventura está llegando a su fin, y en tres días todos estaremos de regreso en nuestras casa, donde abrazaremos a nuestras familias, veremos a nuestros hijos, miraremos mares de fotos que sacamos, contaremos historias sobre el tren, las ciudades por las que pasamos, las personas que se cruzaron por nuestro camino.
Todo para convencernos a nosotros mismo de que aquello realmente sucedió. De aquí a tres días, de vuelta a la rutina diaria, la sensación será de que nunca salimos y fuimos tan lejos. Claro, tenemos las fotos, los boletos, los recuerdos que compramos por el camino, pero el tiempo, único, absoluto, eterno señor de nuestras vidas, nos estará diciendo: tú estuviste siempre en esta casa, en este cuarto, ante esta computadora.
¿Dos semanas? ¿Qué son en una vida entera? Nada cambió en esta calle, los vecinos siguen comentando los mismos asuntos, el periódico que fuiste a comprar en la mañana trae exactamente las mismas noticias (…).
No, nada cambió. Sólo nosotros, que viajamos en busca de nuestro reino y descubrimos tierras que nunca habíamos pisado antes, sabemos que somos diferentes. Pero cuanto más explicamos, más nos convencemos de que ese viaje, como todos los anteriores, existe solamente en nuestra memoria. Tal vez algo para contar a los nietos, o eventualmente escribir un libro al respecto, ¿pero qué podremos decir exactamente?
Nada. Quizás lo que sucedió allá afuera, pero nunca lo que se transformó aquí dentro.
Aleph. Pablo Coelho


QUE GANAS DE VIAJAR OTRA VEZ


miércoles, 7 de marzo de 2012

y volvi...

Un mes. Un mes desde que deje los Estados Unidos (no digo un mes desde que volvi porqe en estos momentos un mes atras estaba volando quien sabe sobre que pais). Una cuenta distinta esta vez, ya no es mas una cuenta regresiva...digamos que es progresiva (Se dice asi?) bueno y va a ser progresiva siempre, cada mes un mes mas y dsp años (ya estoy usando la ñ vieron jaja) y a veces pienso en el momento en que piense...uiii, te acordas cuando vivi en estados unidos, como algo muy lejano. Pero bueno, sin prisa...recien vuelvo ja.

Para ser sincera, pense que la vuelta me iba a costar mucho mas. Muchos dicen que el primer mes de vuelta en tu pais es como el primer mes en USA, que te cuesta adaptarte a todo otra vez, que extrañas lo que dejaste, que estas como desubicada...venia preparada para que realmente me cueste y cuando llegue aca me di cuenta de que nada que ver! Quizas porque yo no me fui escapandome de algo, porque lo que deje aca sigue aca, mi familia, mis amigos, mis ciudades...sii, obvio que algo cambiaron, pero esta todo casi tal cual como cuando me fui. A veces paro un seg y piesno y es como si nunca me hubiera ido. Reconozco que hay momentos en lo que me siento un poco aturdida, o colgada (aunque no lo sienta, pase un año y hasta mas sin ver a algunas personas, obvio que me perdi de muchas cosas) y que la relacion con algunas personas cambia porque mi manera de pensar cambio, o la de ellos, o las de ambos...pero esas cosas pasan sin que uno se vaya a vivir afuera por cierto tiempo. Asi es la vida, no?

Que cosas me costaron? Acostumbrarme a la humedad. No, miento. Vivi 22 años en la humedad y jamas me acostumbre, pero bueno, digamos qe volver a vivir con la humedad. Y sigo sin bancarla. Volver a manejar. Primero un auto con caja manual (ai sii sorry ella...pero es verdad! las primeras veces me olvidaba de poner segunda jaja) y segundo volver a manejar en si, como una loca, alrededor de todos locos aggg. Uno quiere aportar su granito de arena y hacer las cosas bien, y el segundo dia que salgo en auto, paro en un semaforo en rojo y el de atras me choca!!! Porque frene de repente! Que Dios explique como hice para aguantarme todas las puteadas que le hubiera dicho a ese pedazo de pelotudoo, que encima me bardeabaa! Faltaria...yo cumple las reglas, el idiota me choca y encima me quiere hechar la culpa a MI! Ni hablar del tema politica, volver a soportarme a nuestra "querida" presidente por 4 añitos mas, con sus planes "para todos", que sigue fomentando la ignorancia y escuchando a la muy conchuda hablar sin saber. Menos mal que dije ni hablar.

Otro punto en esa lista seguramente sea la facu, pero por suerte todavia sigo de vacaciones, asi que del tema estudio me quejare en otro momento.

Que es lo que no me costo pero ni ahii?! Volver a la noche argentina :) Aiii eso siii, la joda argentina no la cambio por nadaaaaa ;)


Pero despues de un mes voy cayendo en la cuenta de las cosas que deje alla, y que si me van a hacer falta. Uno se va, sabiendo que vuelve y sabiendo que lo de alla, alla se queda. Una amiga me preguntaba el otro dia se habia formado lazos fuerte con alguna persona alla. Y sii, claro que si. Primero porque es una necesidad, somos seres humanos y seres sociales y necesitamos personas a nuestro alrededor. Mas teniendo en cuenta a nuestra cultura y el lugar importante que cumplen la familia y los amigos. Segundo porque te vas alla, sola, chocha de la vida, todo nuevo, una experiencia re copada...pero dsp de unos dias sola empezas a sentir la falta de compañia. Y el instinto de supervivencia te hace salir a buscar amigos jaja. Siempre se dice todas las au pairs tenemos amigas au pairs. Y si, no solo porque son las personas mas al alcance por asi decirlo, sino tambien porque entienden exactamente lo que estas viviendo, mas alla de compartir intereses y formas de pensar. Tuve la suerte de conocer a personas estupendas durante mi experiencia como au pair, y como deciamos con mis mas amigas, terminamos conviertiendonos en la familia que no tenemos en USA. Se crean unos lazos fuertes que son dificiles de explicar, porque no son personas que te conocen desde siempre o desde hace mucho, no saben absolutamente todo de vos, de tu vida en tu pais de origen, o de tu familia, pero sin embargo estan ahi como si siempre lo hubieran estado, acompaniandote en el dia a dia, en las nuevas aventuras, en los viajes y sobre todo haciendote el aguante en los momentos de bajon, en los dias tristes, en las semanas dificiles. Son tu soporte y tu empuje en esos momentos en los que tenes ganas de tirar todo a la mierda y no te dejan bajar los brazos porque sben mejor que nadie lo que es estar ahi.

Conoci a mucha gente en USA, de todos lados, en diferentes circunstancias. A todos les agradezco los momentos compratidos, pero son pocos las que realmente se ganaron un lugar en mi corazon. Algunas veces nos hemos quejado de ser un grupo tan chico jaja, pero lo importante es esa relacion que pudimos entablar. Y aunque hoy algunas de esas personitas todavia esten alla y otras ya esten de vuelta, algunas sean compatriotas mias y con otras haya mas fronteras de por medio, se que algun dia nos vamos a reencontrar, y que todo va a ser como si nunca nos hubieramos separado :)

Mientras tanto gracias a Skype por hacer que esa separacion no parezca tan grande jaja ;)